La glándula tiroides, situada en el cuello, produce 2 hormonas principales que son T3 y T4, las cuales regulan el metabolismo del cuerpo. En ocasiones esta glándula sufre trastornos: ya sea produciendo más hormonas de las que debería (hipertiroidismo) o menos de las necesarias (hipotiroidismo). En cualquiera de estos casos, la alimentación desempeña un papel fundamental, pues en el hipotiroidismo el metabolismo disminuye, expresándose en un aumento de peso, mientras que en el hipertiroidismo el metabolismo aumenta, manifestándose en una disminución rápida de peso. Además hay que tener en cuenta que en ambos se alteran las diferentes funciones orgánicas, pudiendo elevarse la glucosa, el colesterol, los triglicéridos, etc; por lo que resulta imprescindible acudir a un nutricionista en cualquiera de estos trastornos.
Para la formación de estas hormonas es imprescindible el yodo, que se obtiene de la ingesta dietética, por ello los alimentos ricos en este mineral deben aumentarse o evitarse según la patología.
CONSEJOS EN EL HIPERTIROIDISMO:
- Evitar la pérdida extrema de peso
- Enriquecer las comidas con lácteos, quesos, aceites y frutos secos
- Incluir cereales (quinua, trigo, arroz, maíz) y tubérculos en cada comida
- Aumentar consumo de: coles, rabanito, maní, melocotón, pepino, tomate, cebolla, espárrago, melón, soya, fresa, pues estos son inhibidores de la absorción del yodo
- Evitar alimentos ricos en yodo: ajo, avena, coco, avellana, pescados, algas marinas, lentejas, tomate, manzana, mango, nueces guisantes, almendras y espinaca
- Evitar té, café, estimulantes, tabaco, alcohol
CONSEJOS EN EL HIPOTIROIDISMO:
- Se debe realizar 4 o 5 comidas al día poco abundantes y evitar picar entre ellas. Tampoco es conveniente saltarse ninguna comida principal
- Es preciso aumentar la actividad física diaria: caminar, usar menos el ascensor y más las escaleras, ir en bicicleta, nadar, hacer deporte, etc
- Utilizar formas de cocción bajas en grasas, como a la plancha, al horno, hervido o al vapor. Evitar frituras, rebozados, empanados y conservas en aceite
- Evitar embutidos y carnes grasosas, preferir carnes magras
- Evitar azúcares, dulces y postres
- Disminuir consumo de: coles, rabanito, maní, melocotón, pepino, tomate, cebolla, espárrago, melón, soya, fresa, pues estos son inhibidores de la absorción del yodo
- Aumentar alimentos ricos en yodo: ajo, avena, coco, avellana, pescados, algas marinas, lentejas, tomate, manzana, mango, nueces guisantes, almendras y espinaca.
¿Qué pasa si hay una extracción de la glándula tiroides?
Luego de una tiroidectomía (extirpación de la tiroides), los pacientes deben aumentar sus niveles de hormona estimulante del tiroides y agotar el yodo de todo el cuerpo a través de una dieta baja en yodo.
La complicación más común luego de tiroidectomía es la hipocalcemia, por ello algunos cirujanos recomiendan la administración postoperatoria de calcio y/vit D.
Si aún tienes dolor de garganta, comienza con alimentos blandos que se puedan tragar fácilmente como batidos, sopas, yogur, pudín, verduras tiernas, huevos blandos, puré de patatas y compota de manzana o puré de otra fruta.
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