Cómo mejorar el apetito en bebés de 6 a 12 meses

La falta de apetito en los bebés es un problema común, pues se encuentran en una etapa en la que recién están aprendiendo a ingerir alimentos diferentes a la leche materna y es un proceso que requiere mucha paciencia.

En la mayoría de casos la inapetencia no suele ser motivada por presencia de alguna enfermedad. Las principales causas son de carácter emocional o conductual, ya sea por parte de los padres o el niño, como por ejemplo la angustia a la hora de alimentar al bebé, la restricción de ciertos alimentos o cantidades, rigidez en los horarios, consumo excesivo de alimentos muy dulces y de bajo valor nutricional o los cambios emocionales asociados a acontecimientos familiares. A continuación, se brindan algunos consejos para mejorar el apetito en infantes, los cuales se enfocan en brindar una educación alimentaria apropiada al menor:

• Convertir la hora de comer en un momento tranquilo y relajante, en el cual exista un modelo conductual positivo por parte de la familia para que el niño o niña imite su comportamiento de preferencia que el niño coma junto con la familia.
• No obligar al niño o niña a comer rápido,respetar el ritmo con que come,
• Enseñar al niño o niña a degustar nuevos alimentos de manera progresiva, empezando por cantidades pequeñas, evitando obligar a comerlos si este los rechaza. 
• Evitar ofrecer alimentos entre comidas, sólo brindar agua.
• Comenzar brindando siempre alimentos de consistencia sólida y al último los líquidos.
• Fomentar en el niño la autonomía, de modo que él mismo se lleve los alimentos a la boca. 

• Volver a ofrecer el mismo alimento que rechazó en otra oportunidad bajo otra forma de presentación o preparación y en una cantidad pequeña para fomentar su aceptación.
• Evitar brindar las comidas junto a distracciones como la televisión, tablet, celular o juegos.
• Evitar ofrecerle al niño alimentos empaquetados y no agregar azúcar, sal o especias a las comidas hasta que haya cumplido el año de edad.
• Cuando el niño o niña rechace los alimentos evitar forzar la alimentación o transmitir angustia, enfado o ansiedad, pues dificulta aún más que pueda consumir el alimento.
• No crear dependencias en el niño o niña (por ejemplo, a comer solo cierto tipo de comidas o dar recompensas al terminar de comer).
• Evitar optar por la suplementación con vitaminas, estimulantes del apetito o reemplazadores de comidas como primera opción, consultar siempre primero con el pediatra y el nutricionista.