Las vitaminas forman parte de nuestra alimentación diaria, son sustancias naturales importantes porque intervienen en diversos y complejos procesos metabólicos que se producen dentro de nuestro cuerpo. Aunque la cantidad requerida de vitaminas por cada dia es mínima, su importancia está en que el ser humano no las puede fabricar y dependemos de ellos a través de la alimentación, además ningún alimentos contiene todas las vitaminas necesarias, por lo tanto la dieta de su niño debe ser obligatoriamente variada.
Los suplementos vitamínicos, se definen como productos elaborados a base de vitaminas y minerales, proporcionan hierro, calcio, vitamina C, etc.
Existen muchos preparados vitamínicos en el mercado que contienen una única vitamina, multivitaminas o vitaminas asociadas a minerales y/u oligoelementos. No todos los preparados tienen todas las vitaminas ni en la misma cantidad. Algunos de ellos asocian ciertas sustancias, como colina, gingseng, etc. Aunque en general son bien tolerados, tienen efectos adversos: transtornos gastrointestinales, renales, hepáticas; así como otras deficiencias e interferencia apetito/saciedad.
Entonces ¿Debe un niño tomar suplementos vitamínicos? En definitiva, la suplementación estaría indicada cuando exista un riesgo moderado de malnutrición. Por condiciones clínicas, no sea posible cubrir sus requerimientos calóricos, o de algún nutriente específico con la dieta habitual, también niños con régimen vegetariano se recomienda suplementarse y así poder satisfacer todos los requerimientos de nutrientes en la edad pediátrica, llevar a un crecimiento y desarrollo normal.
En general, excepto en los casos mencionados, lo que se recomienda es ofrecer al niño una dieta variada y sana, que incluya todos los días alimentos de los tres grupos de alimentos y de esta manera estarán cubiertas todas las necesidades vitamínicas.
También se debe tener en cuenta que los excesos son perjudiciales. Para cada vitamina existe una dosis máxima permitida la cual es establecida por organismos internacionales si se exceden estas dosis sería perjudicial para la salud. Las vitaminas hidrosolubles como la B y la C son inofensivas, porque se almacenan por poco tiempo y su exceso es luego expulsado por el organismo. Sin embargo, el exceso de vitaminas liposolubles como la A, D, y K se acumula en el hígado y en el tejido adiposo durante varios meses, causando diversas complicaciones.
No compre suplementos sin antes consultar a su especialista recuerde que lo principal es la vitamina O (olla). http://www.nutriyachay.com/nutricion-bebes-infantil.php
Karem Soto Bernal
Licenciada en Nutrición y Dietética
C.N.P.3965
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